Mutación genética


 
Escalpelo en mano, veo que los logopedas se acercan a mi boca.
    ─No se preocupe, una pequeña incisión en la lengua de su hija será suficiente.
Mi madre, erguida y sin el menor atisbo de  compasión por mí, ordena:
    ─¡Adelante! ¡Cuánto antes acabe mejor! Ya estoy harta de tanta humanidad.
Luego, escondiendo su lengua viperina en el verdoso cuerpo, aguarda, pacientemente enrollada, el fatídico desenlace.
    ¡Satanás! Hubiese preferido el papel de Eva en esta ocasión.


_____________________


La sonrisa pintada en mi boca tras la lectura de los últimos micros ganadores del concurso de Radio Castellón Cadena Ser  y un mordisco a la manzana que estaba merendando,  dieron como resultado esta mutación de raíces bíblicas.  

La frase que debía incluir esa semana era 《Se acercan a mi boca》